Respuesta insatisfactoria a nuestro pedido de información pública

El equipo de Activismo Judicial de la Fundación Apolo, coordinado por el Dr. José Lucas Magioncalda, ha recibido una respuesta, por parte del Sr. Esteban Falcon, Titular de la Unidad Gabinete de Asesores del Ministerio de Cultura, el día 14 de abril del corriente año sobre el pedido de información sobre erogaciones en materia cultural. El mismo fue solicitado el día 31 de marzo del año en curso.

La respuesta que hemos recibido por parte del representante de aquel Ministerio, indica que la cantidad de artistas que se convocarán durante el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio se llevará a cabo mediante la suscripción de un Convenio con el Consejo Federal de Cultura.

Asimismo, el número de artistas convocados será de trescientos sesenta y de diferentes disciplinas, dividiéndose en 15 por provincia, que serán seleccionados por cada autoridad provincial del ámbito de la cultura.

En respuesta al pedido de información, el Sr. Esteban Falcon, también indica, que se encuentra abierta la convocatoria al Fondo Desarrollar. El mismo es concursable y destinará dinero de los contribuyentes a espacios culturales con sede en cualquier punto del país.

Junto con el equipo, insistimos que estas erogaciones son totalmente innecesarias. El COVID-19 nos colocó frente a una gran y trágica crisis en materia económica, sin posibilidades de mejorar a corto plazo. Además de que un artista cante por redes sociales no es un bien esencial para los ciudadanos, es importante destacar que se torna ya hasta en fascista el hecho de que el Estado decida cómo se debe divertir la población. La diversión pasa por una esfera totalmente privada de cada persona, y el Estado asumiendo el rol de divertimento de sus ciudadanos, es una clara demostración de inmiscusión en la vida privada de las personas. Asimismo, es poco claro el método de selección de los artistas, por lo que si se agrega a esto que el Estado no es quién para decidir qué artista es bueno y cuál no, creemos firmemente que este tipo de gastos no deben darse en nuestro país.

El estado debe reevaluar su actitud frente a la toma de decisiones en un momento de crisis, y priorizar cuáles son las necesidades que nos urge como sociedad.